¿Te gustaría hacer un cambio radical en tu casa, pero no sabes por dónde empezar? ¿Qué te parece por el suelo? En nuestro estudio de interiorismo te proponemos algunas ideas para actualizar el suelo de tu casa ¡y sin obras!
Una de las primeras opciones que se nos vienen a la mente a la hora de cambiar un suelo sin obras son las tarimas de parquet flotante. Estas se encuentran a la venta con espesores de entre 9 y 16 mm y el sistema de montaje es muy rápido. Gracias a sus perfiles que encajan entre sí, solo tendrás que colocar las láminas sobre el suelo e ir ensamblando una con otra.
El micromortero es todo un objeto de deseo para cualquier estudio de interiorismo. Los revestimientos continuos de cemento son la opción ideal para una reforma, ya que su escaso espesor y su increíble adherencia permiten aplicarlo sobre una amplia variedad de superficies como los azulejos, el hormigón o el mármol, entre otros.
El vinilo es una gran alternativa a los suelos de parquet o madera. Se trata de un material resistente, con propiedades aislantes acústicas y muy versátil. Puede imitar materiales como madera o tejidos hasta piedra u hormigón. Además es muy fácil de instalar, en loseta, lama o rollo, encolado o con un sistema como el del parquet flotante.
El linóleo es un material natural que se emplea desde hace más de un siglo, y que es la respuesta a un diseño de interiores más ecológico y sostenible. Puedes encontrarlo en formato de losetas, lo que hace su instalación fácil y rápida.
Aunque surgió como un material de instalación temporal, el suelo cerámico de colocación en seco se ha popularizado para el pavimento de viviendas. Su instalación es muy sencilla, ya que se trata de baldosas sobre un molde de plástico que constituye la base y las juntas de unión, de esta forma, no se requiere ningún tipo de adhesivo.
Como interiorista en Vigo, no sabría con cuál de estas opciones quedarme. Todo depende del tipo de vivienda, de las necesidades que se quieran cubrir y del gusto de cada propietario. y tú, ¿cuál elegirías?